Sindicatos de la Policía Nacional han calificado de «escándalo» que los jueces de la Audiencia Nacional y de la Audiencia Provincial de Málaga dejaran en libertad provisional a Karim Bouyakhrichan, presunto cabecilla de uno de los clanes de la Mocro Maffia, buscado de nuevo al haberse fugado cuando era reclamado por Países Bajos.
«En el seno de la Policía Nacional nadie se explica cómo se le pudo conceder la libertad provisional», han señalado desde JUPOL a Europa Press. Por su parte, el SUP ha lamentado la «descoordinación judicial» después de una operación de agentes de la Policía Nacional que detuvo en enero en Málaga a este presunto líder de una de las ramificaciones de la Mocro Maffia.
Los sindicatos han recordado que la Policía informó en rueda de prensa en enero de la operación con la que se detuvo a Karim, señalado como «objetivo prioritario» por su relación dentro del entramado criminal de la Mocro Maffia, responsable de las amenazas a la Casa Real de Países Bajos.
En concreto, los responsables policiales apuntaron que Karim era un «histórico narcotraficante en la Costa del Sol», con conexiones con organizaciones de América Latina encargadas del tráfico de cocaína y otras sustancias ilegales. Estaba bajo investigación al menos desde el asesinato en 2014 en Málaga de su hermano, Samir Bouyakhrichan, y de quien presuntamente heredó el liderato de uno de los clanes más importantes de la Mocro Maffia.
NO CUMPLÍA REQUISITOS
«Nos parece un auténtico escándalo; cuesta creer que cumpliera alguno de los requisitos que se exige para la libertad provisional, como es el riesgo de fuga que evidentemente lo había y a la vista está», han apuntado desde JUPOL, que subraya que existía además riesgo de reiteración delictiva al ser líder de una organización criminal y también de eliminación de pruebas.
En enero, la Policía Nacional dio detalles en una rueda de prensa en el complejo policial de Canillas (Madrid) de la operación con la que habían golpeado a esta estructura de la Mocro Maffia asentada en la Costa del Sol que blanqueaba dinero del narcotráfico, bloqueando 172 propiedades valoradas en 50 millones de euros y cerca de tres millones en cuentas bancarias. Los responsables de la UDEF se felicitaron por arrestar tras años de investigación a un «objetivo prioritario».
«Una vez más vemos que la Policía hace un trabajo encomiable y, desgraciadamente, desde la judicatura están más preocupados en ser garantistas con los delincuentes que en proteger a los policías y a la ciudadanía en general», han indicado desde JUPOL.
El SUP ha reclamado, además, que cuando los órganos judiciales tengan que decidir sobre decisiones como la puesta en libertad de delincuentes de especial peligrosidad se cuente con la valoración directa de los investigadores de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para, de esta forma, contar con una información lo más completa posible sobre posibles riesgos.
EL GOBIERNO LO VE PREOCUPANTE
En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, ha calificado de «preocupante» la fuga del líder de la Mocro Maffia detenido en enero en Málaga tras quedar en libertad provisional por decisión judicial cuando era reclamado por Países Bajos.
Bolaños ha dicho que su deseo es que «cuanto antes» las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado lo vuelvan a poner a disposición judicial y ha recordado que las autoridades judiciales españolas, de hecho, «ya han dictado una orden de búsqueda»
Los diferentes clanes de este grupo criminal están detrás de numerosos hechos delictivos relacionados con el tráfico de drogas, el blanqueo, ajuste de cuentas y también de las amenazas a la Casa Real holandesa y, en concreto, contra la princesa heredera al trono, Catalina Amalia de Orange.
La nueva orden de búsqueda emitida por la Audiencia Nacional se ha conocido justo una semana después de que el rey Guillermo Alejandro agradeciera ante los Reyes de España la protección brindada a su hija y heredera, la Princesa de Orange.
En enero, tras ser detenido, la Policía destacó que la Mocro Maffia es una organización formada por ciudadanos holandeses de origen marroquí, apoyada a veces por testaferros españoles. Además, subrayaron su violencia extrema y amenazas a diferentes instituciones holandesas y a periodistas.
DECISIONES JUDICIALES A FAVOR DE LIBERTAD
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno acordó dejar en libertad con medidas cautelares al ahora fugado líder de la Mocro Maffia Karim Bouyakhrichan después de recabar informe de la Fiscalía Antidroga y una vez que un juzgado de Marbella pusiera impedimentos para la entrega a Holanda porque tenía un procedimiento abierto por blanqueo.
Así lo explican fuentes jurídicas a Europa Press, que concretan que la Audiencia Nacional, previo informe de Fiscalía, acordó en enero su puesta en libertad con medidas como la entrega del pasaporte, dado que no podía ser entregado en el marco de la orden europea de detención y entrega (OEDE) expedida por Holanda.
Estas mismas fuentes explican que, posteriormente, la Audiencia Provincial de Málaga estimó un recurso del cabecilla de la Mocro Maffia, que permanecía en prisión provisional allí, y acordó su puesta en libertad con una fianza de 50.000 euros, retirada de pasaporte y comparecencias quincenales. El Ministerio Público, según fuentes fiscales, informó en contra de esa puesta en libertad.
Tras esa decisión, la Audiencia Nacional recibió una ampliación de la OEDE de Holanda, que le reclama por tráfico de drogas, e Ismael Moreno le citó, pero Karim Bouyakhrichan ya no se presentó y el magistrado acordó dictar una orden de detención.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han precisado que el investigado ha estado firmando fuera de Marbella en relación con esta causa «y se notificaban al Juzgado número 4 de Marbella unos días después», señalando que «la última firma recibida correspondió a la del 1 de abril».
En el auto fechado el 22 de febrero, el Tribunal de Málaga indicaba que en contra de lo que se alega en el recurso de la defensa, «sí existe riesgo de fuga», aunque añadiendo que la prisión se podía sustituir por medidas cautelares «menos gravosas».