El diputado nacional de Vox por Málaga Carlos Hernández Quero ha expresado «una firme oposición a la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) propuesta por el Ayuntamiento de Málaga», así como por otros consistorios y ha exigido a PP y PSOE que «reconsideren la ZBE y busquen alternativas que no ignoren la realidad de los malagueños».
Hernández Quero, que ha fijado la posición de su grupo parlamentario durante un debate en el Congreso de los Diputados, ha criticado la iniciativa y ha dicho que «beneficia sólo a una pequeña élite mientras perjudica a la mayoría de los malagueños».
Así, se ha referido al caso de Málaga y ha añadido que «la ZBE está programada para comenzar su implementación en breve, tras finalizar su tramitación, incluyendo un período de exposición pública y la aprobación final en el pleno municipal».
Hernández Quero ha lamentado que «los ‘populares’ sigan comprando las políticas de la izquierda que sólo defienden los intereses de unos pocos en detrimento de unos muchos».
«Una problemática esta que desde Vox no es la primera vez que se pone sobre la mesa en Málaga. Y es que ya el pasado mes de septiembre, desde el grupo municipal de Vox se presentó una iniciativa en la que el portavoz municipal Antonio Alcázar defendía que Málaga requiere una estrategia de movilidad eficiente y efectiva, fundamentada en estudios realistas y opciones de transporte alternativas, sin restringir la libertad de movimiento de los ciudadanos», ha recordado.
Ha insistido en que «Málaga tiene muchos retos por delante en lo relativo a la movilidad, pero para los políticos parece que la prioridad es hacer las cosas más difíciles a las clases populares. Ellos son los verdaderos perjudicados de estas políticas. No son zonas de bajas emisiones, son fronteras de clase para que los trabajadores manuales, los comerciantes y las familias que viven en la periferia no entren al interior de la ciudad».
Asimismo, el diputado de Vox ha argumentado que «la ZBE transforma el centro de Málaga en una urbanización privada». «El malagueño medio cada vez tiene menos poder adquisitivo, ha sido desplazado hacia las afueras, tiene dificilísimo el acceso a la vivienda y encima ahora le dicen que el centro de su ciudad es un coto exclusivo para unos pocos».
También ha criticado las «políticas de subvenciones para vehículos eléctricos», que «sólo son accesibles para quienes ya poseen una renta elevada». «Se está estigmatizando y cargando de impuestos a los que más dependen de sus vehículos para trabajar, sin ofrecerles alternativas reales o asequibles», ha apostillado.
Por otro lado, Hernández Quero ha criticado «la obsesión del bipartidismo por las ZBE» cuando, a su juicio, «los principales problemas del país relativos a movilidad son otros»: «El estado decadente de la red de cercanías en muchas provincias, la falta de tren de alta velocidad en algunas regiones, la ausencia de aparcamientos disuasorios a la entrada de las ciudades, los problemas de conexión de los pequeños municipios con las áreas más pobladas, la distancia a servicios básicos, los elevados peajes o las familias que no pueden tener más hijos por su incapacidad para cambiar de vehículo», ha dicho.
Por último, ha apelado al Gobierno y al Ayuntamiento «que gobierna el Partido Popular en Málaga para que reconsideren esta medida y busquen alternativas que verdaderamente beneficien a todos los ciudadanos, sin discriminación ni privilegios».
«España, y Málaga en particular, no deben convertirse en repúblicas de zonas de bajas emisiones que ignoren las realidades y necesidades de sus vecinos. Hay que poner en el centro el bienestar material de la mayoría social», ha concluido.