Desde este miércoles, 21 de febrero, los municipios de la Costa del Sol implementarán una medida crítica ante la sequía: la reducción de la presión del agua. La Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, junto con Acosol, la empresa pública encargada del ciclo integral del agua, han iniciado esta estrategia para ajustar el consumo a las nuevas restricciones impuestas por la sequía.
La regulación afectará a todos los municipios bajo la jurisdicción de la Mancomunidad, incluyendo Benahavis, Benalmádena, Casares, Estepona, Fuengirola, Istán, Manilva, Marbella, Mijas, Ojén y Torremolinos. Esta acción responde al límite de consumo de agua establecido por el comité de sequía andaluz, ahora reducido a 160 litros por habitante y día, en contraste con el límite anterior de 200 litros.
Esta severa medida se suma a otras ya en vigor debido a la situación de sequía excepcional que enfrenta la región, declarada oficialmente en el BOJA del pasado 30 de octubre. Se han promovido restricciones como la prohibición del riego de parques, jardines y campos de golf con agua potable, así como limitaciones en el llenado de piscinas, la limpieza de vehículos y el uso de fuentes y duchas públicas.
La reducción de la presión del agua se aplicará principalmente durante la noche, entre las 00:00 y las 06:00 horas, excepto los sábados. Esta medida podría provocar la falta de suministro en hogares y establecimientos, especialmente aquellos sin reservas propias de agua o ubicados en zonas elevadas.
Acosol ha hecho un llamado a la ciudadanía para que colabore en la reducción del consumo de agua, subrayando la importancia de un uso responsable del recurso. La entidad ha resaltado la coordinación entre los municipios, la Mancomunidad y las operadoras de agua en la lucha contra los efectos de la sequía prolongada, enfatizando la necesidad de una acción conjunta y decidida para enfrentar esta crisis.