La coordinadora provincial de Izquierda Unida Málaga, Toni Morillas, ha valorado que “tras meses de presión vecinal, social e institucional”, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) haya anulado el anteproyecto de la depuradora del Guadalhorce, lo que obligado a la Junta de Andalucía a paralizar las obras en la Vega de Mestanza”.
Morillas ha advertido de que “esta paralización no es suficiente, el ejecutivo de Juanma Moreno está promoviendo un atentado ambiental, por eso exigimos la reubicación inmediata de la depuradora en una zona adecuada, sin afecciones ambientales y fuera del dominio público hidráulico”.
Asimismo, ha criticado la “irresponsabilidad del PP que, no sólo ha apostado por una ubicación insostenible y contraria a la legislación, sino que ha provocado el retraso de una infraestructura estratégica, con las consiguientes afecciones ambientales y sanciones de la UE por incumplimiento de la directiva marco del agua”.
“Moreno está jugado con la salud ambiental y con el dinero público. El proyecto actual, valorado en más de 131 millones de euros, pretende levantar una isla artificial de cuatro metros de altura en pleno cauce del Guadalhorce. Una aberración ecológica y un despilfarro económico cuando existen alternativas viables, sin afección ambiental, en suelos públicos y a un tercio del coste”, ha criticado en un comunicado Morillas.
Desde IU arremeten contra el plan del PP que “suponía arrasar más de 20.000 árboles en una de las últimas vegas agrícolas activas del entorno metropolitano de Málaga y Alhaurín de la Torre” y han añadido que “Vega de Mestanza no puede convertirse en un vertedero de hormigón, es un enclave protegido, de gran valor agrícola, ecológico y paisajístico, que el ejecutivo andaluz del PP quiere destruir en contra de la voluntad de la ciudadanía y saltándose las propias prescripciones del proyecto, el TSJA le ha dado un varapalo y ahora tendrían que tomar nota y desistir del proyecto”.
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