El subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, ha mantenido este martes una reunión con la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Ronda y Campillos-Guadalteba (Apymer), representada por Alberto León Lombardía y Antonio Miguel Palma Ramírez, tesorero y secretario del colectivo, respectivamente.
Entre otros, Salas ha lamentado que la Junta de Andalucía “mantenga incomunicada a la comarca tras el cierre de la A-397” y ha pedido “celeridad” al presidente, Juanma Moreno, para reabrir la vía.
Salas ha escuchado al colectivo empresarial “que ha mostrado su preocupación por el cierre de la A-397, de titularidad de la Junta de Andalucía, y los perjuicios que el cierre de esta vía está ocasionando no sólo a los vecinos de la Serranía de Ronda, sino a todo el tejido empresarial de la zona”.
El subdelegado ha mostrado su “solidaridad” con los vecinos y tejido empresarial de la Serranía y ha exigido al presidente de la Junta de Andalucía “celeridad en la reapertura de la A-397” y ha puesto como ejemplo que “el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible tardó tan sólo tres semanas en reabrir la A-45, afectada también por un derrumbe de talud en su calzada”.
Por otro lado, Salas ha informado al colectivo empresarial sobre las “actuaciones que está llevando a cabo el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible en la zona occidental de la provincia dentro de su ámbito de competencias y ha recalcado que la Junta de Andalucía debe acompañar con medidas para mejorar la movilidad en la Serranía de Ronda en las vías de su competencia”.
El subdelegado del Gobierno ha exigido a la Junta de Andalucía “medidas de ayuda a la comarca de ronda y a su tejido empresarial como consecuencia del corte de la A-397”.
“Estamos dispuestos a abrir el peaje de la AP-7 en el momento en el que la Junta de Andalucía, responsable de la incomunicación de la Serranía de Ronda, asuma el coste y nos digan a qué colectivos se ha de dirigir esta apertura del peaje”, ha concluido.
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