El coordinador general del PP de Málaga, Cristóbal Ortega, ha destacado la «cuenta de resultados» del Gobierno andaluz en Málaga en materia hidráulica, con «una inversión que a finales de 2024 alcanzará los 400 millones para obras de esta categoría en la provincia», frente a los «seis años en blanco de Sánchez», pese a que «el Estado tiene actuaciones pendientes de ejecución en la provincia por 2.000 millones de euros».
Además, el coordinador provincial ha advertido en una nota de prensa que, actualmente, «el 42% de la obra pública en Andalucía es para infraestructuras hidráulicas, mientras que en 2019 estaban paralizadas, por lo que no vamos a aceptar lecciones del PSOE andaluz ni del señor Espadas, que se dedica a confundir y mentir en lugar de reclamar las inversiones pendientes al Gobierno».
«La realidad es que el Gobierno confronta mucho y no invierte nada, cero; eludiendo totalmente sus competencias y abandonando a Málaga», ha resaltado Ortega, quien ha afirmado que, por el contrario, la Junta ha asumido competencias «que no le son propias», saliendo en labores de «auxilio» a municipios y al propio Estado.
Además, el dirigente popular ha señalado que Andalucía tiene disponibles 126 hectómetros cúbicos más de agua depurada gracias a la introducción de los tratamientos terciarios, de manera que ha cuadruplicado la producción de agua regenerada para garantizar el riego a productores, pasando del cuatro al 17% y superando a la media nacional y europea gracias a actuaciones como la del Peñón del Cuervo, inaugurada en enero, que ha supuesto una inversión de 27 millones de euros.
Ortega ha valorado en este sentido que la Junta «ha dado prioridad a las inversiones en materia de agua desde el minuto uno», y ha reivindicado la planificación de actuaciones desde el año 2019, antes de la actual sequía, «para tratar de paliar el déficit heredado de anteriores gobiernos socialistas en Andalucía».
Del mismo modo, el representante ‘popular’ ha pedido al Gobierno de España que «se moje» y apruebe Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para las empresas afectadas por la falta de lluvia y que sean considerados «de fuerza mayor», de manera que dichas empresas, «que se ven en una situación realmente complicada», no tengan que sufragar las cotizaciones sociales de los trabajadores afectados.
«Tal y como expuso la consejera Rocío Blanco, la sequía afecta a dos de nuestras principales industrias, como son el sector agrario y el turismo, repercutiendo también negativamente en la industria y el sector servicios, lo que ya se traduce en el empleo y en una bajada de dos puntos del PIB el pasado año», ha explicado Ortega.